Parrafo 1
Aunque soy pequeñuelo,
Me mira el santo Dios,
El oye desde el cielo
Mi humilde y tierna voz.
Parrafo 2
Me ve de su alto asiento,
Mi nombre sabe, sí,
Y cuanto pienso y siento
Conoce desde allí.
Parrafo 3
El mira a cada instante
Lo que hago, bien o mal,
Pues todo está delante
De su ojo paternal.